Patilocos es el blog de mis mascotias que tanto amo e intenta ser de ayuda para los bichitos que son nuestros amiguitos
domingo, 29 de mayo de 2016
Beneficios de un gato para tu salud
Si estáis buscando alguna cura milagrosa en base a alguna receta que tenga como ingrediente un gato, podéis ir en paz. Este post no es para vosotros y probablemente este blog tampoco. Para todos los demás que os gustan los gatos como animales de compañía, compañeros en la vida e incluso hijos predilectos, queremos mostraros cómo un gato puede favoreceros de forma saludable :).
Y es que convivir con un gato aporta ciertos beneficios a nuestra salud. Muchos de ellos basados en algo natural que solamente los gatos llevan de serie, su ronroneo. Sí, ese sonido, que puede asemejarse a veces al de una lavadora (exageramos un poquito), contiene una serie de vibraciones a unas determinadas frecuencias que nos ayudan a prevenir y curar algunas dolencias.
Por si fuera poco, no todo es ronroneo, el comportamiento gatuno también nos beneficia en otras muchas cosas.
Dicho lo cual, ¿os apetece conocer las razones por las que tener un gato es beneficioso para nuestra salud? Pues seguid leyendo. Os esperan unos “remedios” gatunos de lo más “purrr”.
1. ¡Ay, mi corazón!
gato corazonSí, nuestro corazón, ese músculo sano que no necesita acción (que diría Andrés Calamaro). Y sí, sí que podremos darle algo de marcha gracias a los gatos, ya que está demostrado que las personas que conviven con un felino tienen entre un 30-40% menos de riesgo de morir de un ataque al corazón.
Pero cuidado, que el riesgo sea menor no significa que podamos batirlo hasta que haga “pum” y explote. Sólo estamos afirmando que, según varios estudios, nuestro corazón será más saludable. Incluso se ha corroborado que el período postoperatorio de una intervención quirúrgica, en general, es menor en pacientes que conviven con un minino que en los que no, y que son beneficiosos para la recuperación en personas que han sufrido un infarto.
También ayudan a bajar la presión arterial en las personas hipertensas y a disminuir el colesterol. Vamos, que nuestra sangre, con un gato, fluirá como nunca.
2. Huesos de gato
Existe un viejo refrán de veterinarios que dice que “si pones un gato en la misma habitación con un montón de huesos rotos, estos se curarán”. Lejos de querer hacer magia, lo único que esta frase recoge es la experiencia de gente profesional curando fracturas en felinos durante años. Todo veterinario que se preste sabe de la increíble capacidad de recuperación de los huesos de un gato.
huesos de gato
Se cree que esta capacidad radica en el ronroneo del gato, que ayuda a restablecer la unión de fracturas óseas en tiempos muy cortos. Incluso el hecho de que nuestros gatos nos ronroneen encima puede fortalecer nuestros cuerpos y ayudarnos a prevenir enfermedades óseas. Según diversos estudios, si dejas que tu gato se acerque a ti y te ronronee cuando tengas un hueso roto éste sanará antes de lo esperado.
También se ha demostrado que tanto los músculos como los tendones y ligamentos se benefician de estas vibraciones sanando antes, en el caso de que tengamos alguna lesión. Todo un poder curativo el de los gatos. Cabe aquí pensar el decirle a nuestro gato “¡ven y ronronéame mucho!”.
3. Gato desestresante
gato desestresanteHas leído bien. Tener un gato desestresa, acariciar un gato desestresa, y querer a un gato desestresa. ¿Cómo? Pues como no iba a ser de otra forma, de nuevo con su ronroneo. Hay estudios que muestran que éste reduce el estrés debido a las vibraciones que produce de entorno los 20 y 140 hercios. Frecuencia que es considerada beneficiosa para muchas enfermedades. Sería algo así como escuchar música relajante.
¿Qué has tenido un día duro en el trabajo? Coge al gato y acarícialo o simplemente túmbate y deja que sea él el que se acerce. Notarás como tu estado anímico varía para bien. Ellos son grandes contempladores de la vida mediante la calma y pueden enseñarnos a relajarnos en innumerables situaciones. Otra cosa es cuando les pega la vena y se vuelven locos. Ahí es mejor dejarlos a su aire ya que en esos momentos es difícil relajarse con ellos :P.
Tienen un efecto tranquilizador y reconfortante en los seres humanos. Y ya no digamos cuando nos amasan con sus patas delanteras.
Ya sabes, si necesitas un masaje, llama a tu gato.
4. Risoterapia gatuna
risoterapia gatuna
Aquí nos referimos a esos momentos en los que utilizamos la risoterapia en nuestras vidas de mano de nuestros mininos. Y es que son incontables las situaciones en las que tu gato puede hacer que no puedas dejar de reír.
Por poner algún ejemplo podríamos hablar de esos momentos en los que nuestro gatito está disfrutando de su dosis de mimos, retorciéndose en la cama, y de repente se da la vuelta y cae repentinamente. Es difícil no reír y evitar que tu gato se ofenda (son muy suyos :)). O por ejemplo, cuando en un salto perfectamente calculado al milímetro olvidan que la superficie de partida es altamente resbaladiza y, simplemente, terminan cayendo al suelo (desde poca altura) cual paracaidista lo hace desde el cielo. Y qué decir de esos juegos suyos en los que algunas veces se ven atrapados literalmente. Menos mal que ya estamos nosotros para liberarlos.
Podemos encontrar cientos de videos de situaciones donde los gatos nos arrancan unas risas. Qué mejor terapia para nuestro cuerpo que soltar unas carcajadas, aunque sean un poco a su costa ;). La risa reduce el nivel de cortisol de forma considerable, mejora la memoria a corto plazo, hace nuestro sistema más inmune mejorando las defensas naturales del organismo y relaja, entre otros beneficios.
Ríete con tu gato, tu cuerpo te lo agradecerá. Quizás tu gato no tanto :P.
5. Amor incondicional
amor de gato¿Conocéis a alguna persona que absolutamente todos los días de su vida se emocione cuando te ve llegar a casa y que, además, busque tus caricias? No penséis mucho, no hay nadie. Incluso nuestros padres han tenido momentos en los que tenían ganas de vernos y no precisamente para acariciarnos :).
Si nos paramos a pensar, tanto el gato como el perro, es el único que todos los días de su vida te recibirá así, contentísimo de verte. Y por increíble que parezca, aunque hayas tenido el peor de tus días, le acariciarás y tendrás un cariñoso saludo para él.
Y ahora, ¿encontráis el beneficio de esto? Pues no es más que la capacidad de sacarnos de nuestro estado de humor, de apaciguarnos y de sacar lo mejor de nosotros. Esa relación afectiva es muy beneficiosa para nosotros, ya que se trata de un amor incondicional que va más allá de lo físico y material. No importa lo que tengas o no, ni lo guapo o feo que seas, tu gato te querrá por encima de todo. No hace falta decir que esto ayuda a querernos y a aceptarnos, aumentando nuestra autoestima y nuestra seguridad en nosotros mismos.
Toda una terapia de amor gatuno. Al fin y al cabo, ¿quién puede vivir sin amor?
6. Arréglame esa cabeza
gato antidepresivo
Y es que qué mejor compañía que la de un felino cuando una persona tiene una depresión. Su compañía mejora el estado de ánimo y sirve como distracción positiva.
La rutina que necesita un gato, aún no comparable a la del perro, obliga a las personas depresivas a tener una obligación y una responsabilidad que deben hacer continuadamente, evitando durante ciertos momentos el desánimo y la apatía. Llegando incluso a mejorar nuestros hábitos alimenticios, combatiendo la inapetencia, y mejorando la realización de nuestras actividades diarias. Con un gato aprenderemos a tener un horario que hay que cumplir.
Ciertos estudios corroboran el uso de gatos para el tratamiento de la esquizofrenia, el alzheimer, la ansiedad y algunas formas de neurosis. Todo gracias a la estimulación de la producción de endorfinas, que son las sustancias responsables de nuestra felicidad.
7. Llenando un vacío
gato y anciano Existe multitud de personas que, por circunstancias de la vida, no pueden tener hijos. Después de años enfrascadas en una búsqueda imposible para tener un bebé descubren que la naturaleza no les ha brindado ese derecho. Éstas personas pueden llegar a sentir una especie de vacío en sus vidas y es aquí donde los gatos llenan estos espacios a la perfección. Es totalmente contrastable cómo estos mininos pasan a formar parte de esas familias, aún siendo unifamiliares, como si fuesen miembros.
Considerados como hijos llegan a llenar ese vacío y ayudan a superar, con su alegría, juegos y compañía, esa falta afectiva.
Lo mismo sucede con las personas de avanzada edad que han perdido algún ser querido. O para aquellos que, llegada su jubilación, tienen la sensación de dejar de ser útiles para la sociedad. Los gatos son la compañía perfecta para llenar ese vacío.
El exteriorizar el cariño hacia un gato nos hace más comunicativos con las personas que nos rodean. Hace que nuestro mundo se abra. Nos resulta más fácil entablar conversación con gente que no conocemos cuando hay un animal delante.
8. Gatos y niños
gato y niñoEs sabido que convivir con un gato aporta muchos beneficios a los niños. Podríamos decir que, por ejemplo, estimulan la afectividad y responsabilidad de los pequeños al tener que cuidarlos. Hacen que los niños se muestren más sociables y sensibles. Fortalecen sus sistemas inmunológicos ya que crecen en un entorno menos “limpio” dotándolo de unas mayores defensas (lo que consideramos simple adaptación al medio) frente a posibles enfermedades respiratorias o alergias.
Y bueno, qué decir de la compañía que un gato puede hacer a cualquier niño. Haciendo que crezca en ellos un sentimiento de respeto y educación hacia los animales.
Mención a parte, queremos mostraros como los gatos son la perfecta compañía para los niños con autismo. Estos les ayudan a comunicarse aumentando en aquellos la producción de la hormona oxitocina, que se produce al acariciar un gato y que aumenta en el niño los sentimientos de confianza y amor.
Y como una imagen vale más que mil palabras, a continuación os dejamos el video de una niña con autismo y su gata, que seguro os emocionará.
Iris y su gata Thula. La increíble historia de cómo un gato puede cambiar nuestro mundo.
A una temprana edad, Iris fue diagnosticada de un trastorno severo de autismo. Su relación con sus padres, familiares y amigos era, cuando menos, difícil. Incapaz de hablar, su única atracción eran los libros y pintar, llegando incluso a tener un verdadero don con los pinceles. Hasta que llegó Thula a su vida. Una gatita Maine Coon que cambiaría su mundo para siempre.
9. Descanso felino
gato siesta
Si tienes un gato nuestro consejo es que, simplemente, te dejes llevar. Ellos duermen más de la mitad de las horas del día y de esto tenemos que aprender los humanos. No te pedimos que te pases 14 horas durmiendo, no. Pero sí que aproveches esas cabezaditas después de comer, justo cuando tu gato viene a descansar a tu vera, y te pegues una siesta como Dios manda.
Entre los beneficios de dormir una siesta están la mejora de la memoria, la productividad, la atención, la creatividad y, en general, nuestro estado de ánimo. Sí, está claro que para dormir no hace falta un gato, pero te aseguramos que éste ayuda. Te va a costar quitártelo de tu regazo cuando lo veas enrollado y, ya sabes, si no puedes con ellos únete a ellos. ¡A dormir se ha dicho!
10. Calidad de vida
Existen otros beneficios que, sin duda, las personas que conviven con un gato conocen. Pero quizás la más importante de todas, bajo nuestro punto de vista, es que mejoran nuestra calidad de vida. Y no lo decimos nosotros. Innumerables estudios certifican que convivir con un gato mejora y alarga la vida.
calidad de vida gato
Y llegados a este punto sólo nos queda hacerte un par de preguntas si es que no compartes tu casa ya con un minino: ¿a qué estás esperando para poner un gato en tu vida?¿Necesitas más razones? :)
domingo, 22 de mayo de 2016
10 Mitos sobre gatos que no debes de creer
Grandes mitos se han creado alrededor de los gatos, pero ahora sabrás que son solo mentiras, estereotipos que debes dejar de creer. Que siempre caen de pie, que les gusta la leche, que tienen 7 vidas. Hay tantas cosas que se dicen de los gatos y que son falsas, pero...
¿Cuáles son ciertas y cuáles son falsas? Es importante tenerlo claro y no dejarse engañar nunca por los rumores, todos quienes tengan un gato sabrán que son una buena compañia, la convivencia con ellos hizo que se generen algunas ideas falsas al respecto de su cuidado y tipo de vida, así que a continuación te mostramos 10 sorprendentes mitos sobre los gatos...
#10 Los gatos son fríos, distantes y nada amarosos. Creo que el que hizo correr este mito y el que lo cree es porque nunca ha tenido un gato, algunos gatos al ser acariciados pueden rasguñar o morder, los felinos tienen celulas de Merckel en toda la piel, lo que hace que tengan la piel de 4 a 25 veces más sensible que la de nosotros, para evitar los rasguños es importante acostumbrar al gatito a las caricias y contacto físico desde que es pequeño. Si tienes la suerte de tener un gatito en tu vida, sabrás que este mito es mentira, pues pueden ser extremadamente cariñosos.
#9 Los gatos tienen 7 vidas. ¡Esto si que es una locura! los gatos, como el resto de animales tienen una sola vida el hecho de que sean ágiles y que eso les ayude a evitar alguno que otro accidente, no significa que estén protegidos contra cualquier amenza los gatos tienen solo una vida y deben cuidarla.
#8 Los gatos negros dan mala suerte y representan al diablo. El origen de estos mitos son de la Edad Media cuando nace la falsa creencia de considerar al gato, específicamente al negro como de mala suerte. Sin embargo el mito es supersticioso.
#7 Las mujeres embarazadas no deben tener gatos. Mucha gente piensa que los gatos son incompatibles con las mujeres embarazadas, este mito viene del lado de la toxoplasmosis, La toxoplasmosis es una enfermedad producida por un parásito que puede contagiarse a las personas y que los gatos pueden transmitirla a través de las heces felinas. Es una enfermedad peligrosa para el feto en gestación. Lo que la gente no sabe es que en realidad se contrae más por comer carne y vegetales crudos y que un gato puede transmitirla solo si la contrae y si se toca su excremento luego de 24 horas de deposición.
#6 Siempre caen de pie. Ojalá así fuera, pero lamentablemente no es así, eso depende de la altura desde la que caen. Si en el aire el gato tiene tiempo para darse la vuelta sobre si mismo, entonces aterriza de pie. Si no pueden caer sobre su propio cuerpo. Los gatos desarrollan esta habilidad desde los 40 días de edad. Es verdad que no tienen clavículas y que son más ágiles y flexibles que otros animales, sea como sea caer de pie no es garantía.
#5 Es imposible adiestrarlos. Los gatos son animales inteligentes y capaces de aprender y ser educados, básicamente la gente no esta acostumbrada a educar o entrenar a sus gatos, si lo intentan se darán cuenta de lo obedientes que pueden llegar a ser, aunque es mucho más difícil que la del perro, no es absolutamente imposible.
#4 Los gatos son animales sucios. Limpiándose constantemente, el gato es el animal más limpio y más desprovisto de virus que existe, un animal que merece ser acariciado.
#3 Los gatos son solitarios. Para nada, los gatos son animales muy independientes y eso los hace especiales, pero todo gato necesita estar en compañía. Si tienes un gato, bien sabes que le encanta estar acompañado pueden llegar a formar lazos sociales duraderos si jugamos y pasamos tiempo de calidad con ellos.
#2 Los gatos ven en la oscuridad. Si ven en la oscuridad, de hecho la pupila del gato es excepcional en el mundo animal porque puede cerrarse completamente evitando que le entre la luz. Los gatos ven de noche hasta 6 veces mejor que los humanos debido a su anatomía y fisiología retiniana.
#1 La leche es buen alimento para los gatos. No es más que una farsa, si bien a la mayoría de los gatos les gusta la leche, no necesitan tomarla todos los días si están bien alimentados, porque hoy se sabe que los gatos adultos tienen dificultad para digerirla y pueden ser intolerantes a la lactosa. Además no tiene ningún valor nutritivo para los mininos. Así que hay que evitar darles leche.
sábado, 7 de mayo de 2016
CARTA DE UN GATO DESDE EL CIELO...
No llores por mí… Me has dado un hogar donde cobijarme, me has proporcionado alimento y sobre todo, me has dado tu amor y tu compañía. Lo último que querría es verte sufrir por mí. Ahora que no estoy contigo, no quiero verte triste.
Deseo que cuando pienses en mí sonrías, pues así sabré que mi recuerdo te hace feliz. Quiero que recuerdes los buenos momentos que compartimos, nuestras muestras de cariño, nuestros juegos…y si alguna vez te defraudé, o me porté mal, perdóname.
Y, por favor, no tires mis juguetes, ni mi cama, ni mis cosas, porque en este mundo hay muchos otros colegas que viven en soledad, tristes, sin cariño…muchos que darían su vida por compartir la tuya. No, no lo digas, no digas que no quieres tener más animales…eso me hace pensar que el tiempo que estuve contigo no te hice feliz. Por favor, que mi muerte no sea en vano, que sirva para que otro tenga la suerte de poder vivir y conocer lo maravillosa que es tu amistad, que conozca la verdadera vida de gato, que descubra el cariño. No estés triste…yo no lo estoy, porque sé que guardas ese rinconcito especial en tu corazón …para mí
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