Dormir en la misma cama y habitacion con gatos

¿Es seguro dormir con un gato? La mayoría de los personas que conviven con gatos comparten la cama con su compañero felino, ya que a la mayoría de los dueños de gatos les encanta compartir su cama con su gato. En general, no representa ningún problema dormir con tu gato en la misma cama, siempre y cuando nos aseguremos antes de que el felino esté al día con sus vacunas y esté desparasitado regularmente contra parásitos y pulgas. Muchos gatos son activos durante la noche, lo que podría causar un mal descanso si el gato se la pasa toda la noche saltando en la cama mientras intentas dormir, pero en mi experiencia, me parece que los gatos generalmente se adaptan bien a los horarios nocturnos y de descanso de sus compañeros humanos. Pero, en el caso de que el gato sea inquieto por las noches, se recomienda tener una sesión de juegos con el antes de ir a la cama, y ​​luego darle de comer. ¿Quién no debe dormir con gatos? Para las personas que sufren de alergia a los gatos o que tienen asma, se recomienda no dormir con gatos en la misma cama y habitación, ya que podrían empeorar el problema, pero si te encuentras en buen estado de salud, no hay ninguna razón para no hacerlo. Los bebés y los niños pequeños no deben tener gatos en su dormitorio. En los niños pequeños, yo diría que en menores de 4 o 5 años, y, definitivamente, no dejes a un gato cerca de un bebé durmiendo. Decidir con anticipación: No tiene sentido dejar que tu nuevo gato duerma en tu cama y luego cambiar de opinión a las 2 semanas cuando ya se haya acostumbrado a dormir contigo. Los gatitos que acaban de ser separados de su madre y hermanos, a veces pueden ser inquietos las primeras noches en su nuevo hogar. Si este es el caso, recomiendo envolver un reloj dentro de una manta y colocarla en la cama, esto simulará los latidos del corazón de su madre los primeros días alejados. Tambien puedes envolver una bolsa de agua caliente en una manta suave (lo suficientemente segura para que no la muerda y rompa) o proporcionarle un peluche para acurrucarse. Asegúrate que aunque duerma en tu habitación, tenga en todo momento acceso a su bandeja de arena, comedero y bebedero.