sábado, 26 de mayo de 2018

Muy interesante para tener mucho cuidado

Ese es el resultado de la VACUNA ANTI CIO! Este es un asunto muy serio, porque existe una enorme cantidad de tutores que hacen uso del anticonceptivo inyectable (también conocido como "anti-celo") simplemente por desconocimiento, porque nunca nadie (ni siquiera el propio veterinario) los alertó sobre los peligros que esta droga ha demostrado. Obviamente, existen todavía aquellas personas que, aun sabiendo de los riesgos, insisten en hacer uso de ese método anticonceptivo por un motivo sólo: no quieren gastar dinero con la castración. Porque esta economía va a salir muy cara a la hora que tengan que correr y tratar la perra o gata de una infección uterina o de un cáncer (eso se tratará ... capaz que quieran ahorrar allí también). Evitar una cría indeseada es (o debería ser) una de las grandes preocupaciones de los dueños de gatas y perras. La otra es el bienestar del animal. Ambos entran en conflicto cuando el asunto son los métodos anticonceptivos, en particular el uso de anticonceptivos. El comportamiento sexual de los animales en celo a menudo es extremadamente desagradable para el propietario. La presencia de sangrado vaginal, manchas por el suelo, olores, ladridos, atracción de machos y marcación del territorio hacen que los propietarios busquen una solución para esa molestia. Se sabe que muchas personas cometen el equívoco de usar anticonceptivos, imaginándose ser inofensivos, pero no es así. Tales medicamentos presentan gran aceptación, pues son de bajo costo y se pueden encontrar fácilmente en casas de raciones y tiendas del género, además de ser vendidos sin prescripción del médico veterinario, muchas veces siendo aplicados por el propio tutor. Los anticonceptivos se encuentran en forma de comprimidos o inyecciones ("vacunas"), y tienden a retrasar o suprimir la fase de aceptación sexual de los animales, además de molestias como el sangrado de las perras. La manera más utilizada es la inyectable, y la dosis varía de acuerdo con el peso del animal. Hay una fase cierta del ciclo del animal para aplicar el anticonceptivo. En la perra, es más fácil identificar esa fase, pero en la gata, por ser un animal que presenta varios cios al año, es mucho más complicado. Las personas aplican la medicación sin saber el período correcto, lo que puede terminar ocasionando más problemas. Muchos aplican la medicación cuando el animal ya está en el celo, lo que es extremadamente perjudicial para la salud de las mascotas. Además, es muy común gatas preñadas recibir la medicación, pues muchas veces sus tutores ni siquiera saben que están gestantes. En la totalidad de los casos, los fetos morir y quedar retenidos en el útero hasta que ocurra una gran infección, poniendo la vida de la gata en peligro. ¡SEA RESPONSABLE Y CASTRE SUS ANIMALES!