martes, 22 de agosto de 2017

Gustavo Alberto Leccardi Al igual que los humanos, los felinos nacen sin dentadura y les van saliendo poco a poco las piezas, a medida que crecen. De esta manera, los felinos callejeros los usan para cazar y buscarse la comida, y los domésticos, para masticar el alimento balanceado. Es difícil saber cuándo padecen este tipo de afección ya que son animales muy fuertes y aunque les duela continuarán comiendo. Es importante saber que el dolor dental en los gatos suele ser en la mayoría de los casos por afecciones en las piezas ubicadas en los extremos, o sea, en las muelas. Los felinos adultos pueden presentar caries. En esos casos, el dolor dental puede manifestarse de diferentes formas y no todos mostrarán los mismos síntomas. Algunos gatos dejan de comer o simplemente mueven la comida en su boca sin masticarla. También es posible que busquen la comida más húmeda o blanda, y traguen casi en forma directa. Un dolor de muelas puede cambiar el humor de tu gato y que se vuelva más agresivo o se muestre más irritado, debido al malestar. Si le tocás los dientes o la boca gruñirá e incluso intentará morderte o arañarte. Es importante mirarle los dientes para ver si hay alguna anomalía, como algún diente roto o serrado o alguna encía inflamada o sangrando. Si se trata de una infección, podrías ver su boca inflamada o incluso que el animal presente fiebre. También podría tener toda la cara inflamada o sólo el lado en el que presente el problema en su boca. Podés observar si el gato babea y si su saliva tiene sangre. En algunos casos de enfermedad dental o infección les cambiará el aliento. Si notas un olor fuerte de su boca, es probable que tenga algún tipo de infección. Los gatitos nacen sin dientes y cerca de las cuatro semanas empiezan a romper encías los primeros dientes de leche. Ya a los cuatro meses comienzan a cambiarlos por los que serán sus dientes definitivos. De esta manera, tendrán en total 30 piezas compuestas de 12 incisivos (6 superiores e igual cantidad de inferiores), 4 caninos o colmillos (2 superiores y 2 inferiores), 10 premolares (6 arriba y 4 abajo) y 4 molares (2 arriba y del mismo modo abajo). Los dientes de leche son 26 y los molares no saldrán hasta que lleguen los definitivos. Cabe aclarar que usan los incisivos para desgarrar la comida y desenredar su pelo y los colmillos para clavarlos en presas o desgarrar (y desgranar) también el alimento. Sin embargo, los molares no los usan para masticar al igual que nosotros, sino como unas tijeras que cortan la carne y la separan del hueso, es decir, que los usan para cortar. De hecho sus molares no se contraponen, al tiempo que podés observar que muchas veces, al comer, tuercen la cabeza hacia un costado, para ayudarse a cortar la comida. Por último, a las ocho semanas el gato debería tener todos sus dientes de leche y al año ya lucirá los definitivos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario